En esta entrada te contaremos qué ver y hacer en el Sur de Islandia y cuales son, para nosotros, las visitas imprescindibles en una ruta por el sur del país. Además, al final te dejamos un mapa con todas las localizaciones.

Si estás preparando tu viaje por Islandia aquí tienes nuestra guía completa de Islandia con los itinerarios definitivos para recorrer Islandia en 5, 7, 10 y 15 días, cómo elegir la mejor época para viajar y mucho más.

19 imprescindibles que ver y hacer en el Sur de Islandia

El sur de Islandia alberga algunas de las cascadas más impresionantes de todo el país, cañones imponentes, glaciares, playas de arena negra, cráteres de volcanes, campos de lava, y hasta podrás pasear entre las placas tectónicas euroasiática y norteamericana. De verdad, paisajes con los que no podrás para de alucinar.

A continuación te contamos aquellas paradas más imprescindibles del sur de Islandia así como trucos, precios y consejos para que decidas cuáles incluir en tu ruta por el sur del país.

1. Recorrer los imprescindibles del Círculo Dorado

Probablemente una de las rutas de un día más clásicas que hacer por el sur del país ya que tiene un poco de todos, desde cascadas, hasta paseos entre continentes, áreas geotermales… Aunque sea bastante popular tiene algunas paradas imprescindibles.

Te contamos todo en una entrada específica con todo lo que puedes ver y hacer en el Círculo Dorado pero te adelantamos que para nosotros las paradas obligatorias son Gullfoss, el geyser de Strokkur, la cascada de Brúarfoss y el Thingvellir National Park.

2. Seljalandsfoss y Gljufrafoss, dos cascadas imprescindibles en el sur de Islandia

Prepárate y deja a mano el chubasquero, porque vas a visitar una de las cascadas más impresionantes (y que más «moja») del sur del país. Y es que Seljalandsfoss tiene una altura de 60m y la particularidad de que se puede pasar por detrás. Sin duda, toda una experiencia que no puedes perderte en el sur de Islandia. Eso sí, imprescindible chaqueta (o chubasquero), pantalones y calzado impermeables si no quieres acabar empapado.

Si además viajas en invierno puede que te encuentres cerrados algunos caminos en Islandia, como el que cruza por detrás esta cascada, debido al hielo. Además, te serán imprescindibles crampones.

A tan sólo 650m de Seljalandsfoss, está otra cascada que también te recomendamos mucho. Se trata de Gljufrafoss, la cascada «escondida» en una gruta. Para llegar sólo tienes que seguir el camino claramente marcado desde Seljalandsfoss hasta encontrarte con la entrada de la gruta. Podrás atravesar el cañón «fácilmente» simplemente «saltando» entre las piedras (aunque en invierno quizás esto se complique un poco por el hielo). En temporada alta puede que haya «cola» para entrar y/o hacerse la clásica foto.

3. Gluggafoss, la cascada de las «ventanitas»

Muy cerca de las anteriores se encuentra también Gljufrafoss, que quizás no es 100% imprescindible ni tan impresionante, pero es una parada que te recomendamos mucho incluir antes o después de esta visita.

El recorrido por carretera para llegar es precioso y además es una cascada muy poco visitada. Al lado de la misma hay unas mesas de merendero en las que puedes hacer un picnic aprovechando la paz que se respira aquí y el bonito entorno.

4. Skógafoss, la cascada más imponente de Islandia

Continuamos con Skógafoss, donde, una vez más, es mejor tener a mano el chubasquero para aproximarse a la cascada. Si además cuando la visitas tienes suerte y sale el sol, podrás disfrutar de un arcoíris frente a la cascada que te dejará sin palabras.

Desde Skógafoss sale el Fimmvorduhals trail, una ruta de 25km lineales que pasa por 1 volcán, 2 glaciares y ¡26 cascadas! Si eres un amante del senderismo como nosotros y dispones de días extra en el Sur de Islandia es una ruta que deberías considerar. La ruta llega hasta Thorsmork, dónde puedes coger un autobús 4×4 de vuelta (previa reserva). Aunque no pudimos hacerla por falta de tiempo, tiene muy buena pinta si dispones de algún día extra para el sur de Islandia.

5. Kvernufoss, otra cascada que puedes «atravesar» en Islandia

Otra de esas cascadas que no es tan conocida pero que incluiríamos sí o sí en tu ruta por el sur de Islandia. Se trata de Kvernufoss, muy cerquita de Skógafoss. El parking es de pago pero abajo te contamos como ahorrártelo.

El recorrido desde el parking hasta la cascada no te llevará más de 15′ y si te animas, podrás pasar por detrás de la cascada como en Seljalandsfoss. En nuestro caso el tiempo no acompañó pero el sendero para llegar nos pareció espectacular.

6. Acantilados Dyrhólaey y la Playa Reynisfjara, la más peligrosa de Islandia

Si tienes suerte con el tiempo, puedes hacer una parada en los acantilados de Dyrhólaey. Además de unas bonitas vistas de la costa y las formaciones, desde ellos puedes avistar ballenas e incluso los adorables puffins (si es temporada, claro).

Pero lo que sin duda no te puedes perder es la playa de arena negra de Reynisfjara, donde podrás encontrar la famosa cueva de columnas de basalto. Desde ella, a lo lejos también podrás ver las formaciones de Reynisdrangar. También son visibles desde Víkurfjara, otra impresionante playa de arena negra en el pueblo de Vík. Que ya que estás, si quieres unas buenas vistas sobre el pueblo y la costa, puedes acercarte hasta su iglesia.

Eso sí ¡ten cuidado en estas playas! Estas costas son muy peligrosas debido a las «sneaker waves» u «olas silenciosas». De hecho, a la entrada de Reynisfjara hay un semáforo indicando la peligrosidad de las olas en ese momento y dando una serie de recomendaciones como no dar la espalda al mar y mantener siempre una distancia prudencial con la orilla. Y es que estas olas crecen súbitamente, llegando mucho más lejos que las anteriores y con mucha fuerza, pudiendo arrastrarte mar a dentro con facilidad. De hecho, es habitual ver «remojones» de turistas y fotógrafos en la orilla de esta playa, pero, desgraciadamente también ha habido varias muertes por este motivo.

7. Aviones abandonados en el sur de Islandia

El más popular es el avión abandonado Solheimasandur. Para llegar tendrás que caminar unos 8km ida y vuelta por una pista con poco que ver (y que con viento o lluvia puede ser bastante tediosa). Nosotros lo descartamos por climatología y tiempo.

Como alternativa te proponemos el avión abandonado DC-3 en Eyvindarholt. Es más accesible sin andar tanto, también es muy fotogénico y se encuentra muy cerca de Seljalandsfoss.

8. Nauthúsagil, una cascada escondida y desconocida

Si, como a nosotros, te gusta incluir en tu ruta lugares menos concurridos, te recomendamos visitar Nauthúsagil. Esta cascada es una alternativa de cascada «escondida en una gruta» mucho menos visitada que Gljufrafoss aunque también menos accesible.

La dificultad para llegar no es por la distancia ni el desnivel, sino en que en algunos puntos requerirá ayudarse de unas cadenas o incluso cruzar el río. Sólo apto si buscas un poco de aventura y tienes tiempo de sobra.

Para llegar a ella tendrás que recorrer el primer tramo de la carretera 249 que más adelante se transforma en F Road, pero no te preocupes, podrás llegar en cualquier vehículo a las inmediaciones de la cascada, al menos en verano o antes de las primeras nevadas.

9. Senderos mágicos en Thakgil

Thakgil es uno de esos paraísos para los amantes del senderismo. Muy cerquita de Vík se encuentra un paraíso para los senderistas que no se suele incluir en las rutas «habituales» por Islandia… la zona de Thakgil o Þakgil.

La carretera para llegar, como muchas de Islandia, puede estar un poco rota, pero es apta para cualquier vehículo yendo despacio y con cuidado siempre que no haya llovido demasiado. Eso sí, no tiene mantenimiento invernal con lo que el acceso cierra en cuanto caen las primeras nevadas y no vuelve a abrir hasta el siguiente verano. Nosotros lo teníamos todo preparado para hacer alguna ruta en la zona, pero pocos días antes de llegar cerraron la carretera y se nos chafó el plan.

¿Y qué esperar de Thakgil? Pues una zona de paisajes increíbles con cañones, barrancos, ríos, cascadas y glaciares. Probablemente la experiencia más parecida a internarse en las inhóspitas Tierras Altas.

Si tienes la oportunidad de visitar esta zona, te dejamos varias ideas de rutas:

• The Ravine Walk, con 800m de distancia y apenas desnivel es un paseo ideal para familias por los alrededores del camping con vistas al cañón. Recientemente se ha habilitado un trail azul algo más largo que también es ideal si no te quieres complicar. Quizás no son tan impresionantes, pero si más accesibles.
• Remundargil Ravine Loop (o Purple trail), recorre el cañon Remundargil, visitarás la cascada Remundargilsfossi y también disfrutarás de un mirador sobre el glaciar Kötlujökull en una ruta de distancia media pero con un desnivel pronunciado y un terreno de dificultad media/alta.
• Mælifell Loop (Red Trail), espectacular pero aparentemente el más complicado ya que tiene algunas zonas expuestas y hasta 3 cruces de un río con bastante caudal y rápido. No apto para principiantes.
• Austurafréttur Range Loop (Yellow Trail), uno de los más bonitos pero también más largos aunque más asequible en cuanto a dificultad. Ofrece unas vistas increíbles del cañón y además te da un mirador privilegiado sobre los glaciares Kötlujökull y Huldujökull.
• Combinar los Yellow + Red Trail, la ruta más larga de todas pero la más completa también, llegando hasta el glaciar Huldujökull.

Ten en cuenta que el trail rojo (y la combinación del rojo + amarillo) cruza varias veces el río, pero un río que fluye con bastante caudal y fuerza así que no olvides tu calzado impermeable y mejor no hacer esta ruta solo. Este blog está en inglés pero nos pareció súper completo. También puedes leer la experiencia de estos chicos haciendo el trail rojo y amarillo para que decidas si realmente es para ti.

10. Musgo islandés en los campos de lava de Eldhraun

Se trata de los campos de lava de Eldhraun. Con una extensión de 565 km2 son unos de los más grandes de su tipo en el mundo. Fueron formados durante una erupción de 8 meses del volcán Laki, entre junio de 1783 y febrero de 1784. Hoy día, los campos están totalmente cubiertos de un mullido musgo verde que deja un paisaje de lo más peculiar.

Aunque los atravesarás simplemente conduciendo por la Ring Road, la mejor forma de saborearlos es aparcar el coche y hacer una pequeña parada para disfrutar desde el pequeño mirador que encontrarás en el Elhdraun Lava Field Parking (tienes la ubicación en el mapa).

¡Ojo! El musgo islandés forma parte de un ecosistema delicado y tarda años en regenerarse, así que no lo pises y usa sólo los caminos habilitados.

11. La cueva de Yoda, un must para los fans de la Guerra de las Galaxias

Si eres un friki de la saga, sin duda no te puedes perder la visita a la famosa Yoda Cave. Nosotros hemos de reconocer que nos la saltamos porque íbamos justos de tiempo y además nos pareció un precio alto teniendo en cuenta que es «sólo» una cueva y no somos demasiado fans de las películas. Pero sin duda puedes obtener unas curiosas fotos en este emplazamiento.

12. El cañón de Fjadrargljufur, uno de los imprescindibles del sur de Islandia

El cañón Fjaðrárgljúfur es una de esas paradas imprescindibles en el sur de Islandia. Tiene aproximadamente 2km de largo y sus paredes alcanzan hasta los 100 metros de altura. Formado hace unos 9000 años, sus particulares formas fueron talladas por el río Fjaðrá, que fluye en su centro.

Fjaðrárgljúfur ganó fama internacional en 2015 cuando Justin Bieber grabó el videoclip de su canción I’ll Show You en este lugar. Desde entonces, se ha convertido en un destino popular para los turistas. Tanto es así, que el aumento del número de visitantes llevó a las autoridades a cerrar temporalmente el acceso para evitar daños al medio ambiente del cañón.

Por esto mismo, es importante recorrer el cañón solo desde las sendas habilitadas para proteger su frágil ecosistema.

13. Trekking y visita a una cueva de hielo en el glaciar Vatnajökull

Sin duda una de las mejores experiencias que puedes hacer en Islandia es caminar por el glaciar Vatnajökull, el más grande de Islandia y el segundo más grande de Europa. Te recomendemos encarecidamente que no te pierdas esta experiencia (ya sea en este o en cualquier otro glaciar). Si además viajas en temporada, podrás combinar el trekking con una visita a alguna cueva de hielo haciendo de esta una experiencia redonda. También puedes hacer sólo la visita a la cueva de hielo, pero pasarás mucho menos tiempo sobre el glaciar y la verdad… sería una pena, porque es un alucine.

¡Ojo! La temporada para poder visitar las cuevas de hielo es entre Octubre y Marzo (aunque mejor comprobar las fechas antes de tu viaje porque esto puede variar ligeramente). De todas formas, si viajas en verano y realmente quieres visitar una cueva de hielo en Islandia, existe una cueva visitable todo el año que también se encuentra en el sur de Islandia. Se trata de la cueva de hielo de Katla, muy cerquita de Vík.

No olvides reservar tu excursión con antelación porque los grupos son reducidos y las plazas se agotan . Nosotros te recomendamos hacerlo con Civitatis o Get Your Guide que tienen cancelación gratuita. En nuestro caso elegimos este Trekking de 5h + visita a una Cueva Glaciar con Guide To Iceland. Lo disfrutamos muchísimo y hasta se nos hizo corto (y eso que tuvimos mala suerte y no pudimos visitar la cueva de hielo). También existen alternativas de trekkings de 3h con visita a la cueva de hielo o excursiones en las que sólo se visita la cueva de hielo. Sea como sea, no te pierdas esta experiencia única.

14. Svartifoss, la cascada de las columnas de basalto

En el mismo Parque Nacional Skaftafell, en que se encuentra el acceso al glaciar de Vatnajökull puedes hacer una pequeña ruta y visitar Svartifoss. Es una cascada peculiar por estar rodeada de columnas de basalto, y se llega fácilmente en media hora.

Si cuentas con tiempo y energías también puedes acercarte al mirador Sjónarnípa, que da una perspectiva impresionante sobre el glaciar o incluso combinar ambas rutas en un circuito de no más de 8km.

15. Múlagljúfur, un cañón poco conocido e imprescindible que visitar en Islandia

Quizás no es tan popular como el cañón de nombre impronunciable (Fjaðrárgljúfur) pero para nosotros este cañón mucho menos visitado resulto ser uno de los lugares que más disfrutamos en Islandia. Así que si no te importa caminar un poco, nuestro consejo es que lo incluyas porque te aseguramos que el esfuerzo valdrá 100% la pena.

Antes de iniciar esta ruta tendrás que recorrer un par de km en coche por una carretera un poco bacheada (pero apta para cualquier vehículo). Después, solo tendrás que caminar 6km (ida y vuelta). Querrás pararte a cada minuto, para ver como las aves sobrevuelan el cañón a tus pies o disfrutar de las cascadas que se precipitan al fondo. Si tienes suerte y está despejado, al llegar al final también verás el glaciar de fondo. Si no quieres hacerla completa te aconsejamos recorrer al menos los primeros km para obtener unas vistas épicas.

¡Ojo! No es recomendable hacerla en invierno ya que si está helado (o nevado) puede llegar a ser peligrosa. En caso contrario no tiene mayor dificultad… Eso sí, te tendrás que enfrentar a alguna cuestecilla y un pequeño vadeo de río, pero nada que con paciencia y cuidado no pueda hacer cualquiera.

16. Diamond beach y los icebergs de la laguna Jökulsárlón

Sin duda dos imprescindibles del sur de Islandia, la playa de Diamond beach y la laguna glaciar de Jökulsárlón.

En la primera, si tienes suerte y dependiendo de la época, podrás ver los famosos «diamantes», formados por esos bloques de hielo que se desprenden del glaciar y flotan desde la laguna hasta el mar, quedándose en ocasiones «varados» en la playa de arena negra. De todas formas, esto depende mucho de la época, las mareas y las corrientes.

Pero si no consigues ver muchos diamantes no te preocupes, seguro que en Jökulsárlón verás un montón de icebergs flotando. Probablemente también puedas ver aquí focas nadando, pescando o descansando entre los icebergs así que ¡estate atento! Si aún quieres más, existe la posibilidad de contratar excursiones en barco por la laguna para ver el glaciar y los icebergs más de cerca.

Opcionalmente hay otras dos lagunas glaciares que te dejamos en el mapa y que te recomendamos visitar si crees que vas bien de tiempo. Se trata de las lagunas de Fjallsárlón y Svínafellsjökull. En ambas el parking es gratuito y a solo 10′ podrás tener unas bonitas vistas de la laguna y el glaciar.

17. La playa de Stokksnes y la imponente Vestrahorn «reflejada» en sus aguas

Vestrahorn es una mítica e imponente montaña que habrás visto un ciento de veces en fotos de Islandia. Se suele ver reflejada sobre una fina capa de agua en una impresionante playa de arena negra… Pero déjanos gestionar tus expectativas… Esto no siempre va a ser así…

Hay varios factores que pueden cambiar radicalmente tu visita. Lo ideal es que te coincida un día soleado sin viento y con marea baja para que se produzca ese perfecto «efecto espejo». Nosotros, por ejemplo, nos encontramos todo lo contrario, viento, marea alta y nubarrones así que Vestrahorn apenas se intuía el día que llegamos. Por suerte, al día siguiente se despejó unos minutos y pudimos verla, pero tenlo en cuenta para no llevarte una decepción. Especialmente, si viajas hasta este punto de la isla sólo para esta visita…

Si tienes mala suerte con el tiempo siempre te quedará el consuelo de intentar ver focas (nosotros no tuvimos suerte), o visitar el pueblo y barco vikingos (un poco en ruinas), ya que están incluidos en la entrada.

Por todo esto y porque es la parada más «alejada» del sur de Islandia, nosotros no la consideramos realmente algo imprescindible salvo que dispongas de más de 5 días para recorrer el país.

18. Recorrer la península de Reykjanes

Otra de las mejores cosas que hacer en Islandia si viajas pocos días, es recorrer la península de Reykjanes. Se trata de una región de intensa actividad geotérmica y volcánica muy popular en los últimos años, tras reactivarse la actividad volcánica en la zona en 2021 con la erupción del volcán Fagradalsfjall.

Además de recorrer las coladas de lava de este volcán y los que le siguieron (porque desde entonces la actividad volcánica en la zona no ha cesado), puedes visitar zonas geotermales como Seltún o las aguas termales de la popular Laguna Azul (Blue Lagoon). Te contamos todo lo que ver y hacer en la península de Reykjanes con más detalle en esta entrada.

19. Visita Reikiavik, la capital del país

No te vamos a engañar, para nosotros lo mejor de Islandia son los paisajes, pero hemos de reconocer que Reikiavik tiene su encanto. El centro de la ciudad es pequeño y no te llevará mucho recorrerlo. De hecho nosotros lo visitamos en unas horas la última tarde/noche antes de coger el vuelo de vuelta. Si te cuadra en la agenda te recomendamos mucho hacer un free tour para conocer más del país y la cultura.

Como puntos destacados, no te pierdas la curiosa iglesia Hallgrímskirkja con su particular arquitectura inspirada en las columnas de basalto. Tampoco te olvides de recorrer la calle que conecta la iglesia con el centro, donde encontrarás multitud de cafés, tienditas, bares y restaurantes con rollo donde hacer un descanso así como el «clásico» arcoíris pintado en la calle.

También tienes opción de visitar las termas de Sky Lagoon en la ciudad. Incluso, dependiendo de la época, podrías bañarte en unas pequeñas piscinas geotermales gratuitas que existen al lado de la playa, en Nauthólsvík. O, si te apetece un plan original, también puedes aprovechar para hacer una excursión para avistar ballenas desde Reikiavik.

Mapa con los imprescindibles del sur de Islandia

Y hasta aquí las paradas más imprescindibles del sur de Islandia. Por supuesto, hay muchas más y, por supuesto, te puedes saltar alguna según tus gustos e intereses, como te hemos ido comentando a lo largo de la entrada. En el siguiente mapa te dejamos todas las ubicaciones y alguna extra por si dispones de días de sobra.

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Esperamos que te haya sido útil esta entrada con lo mejor que ver y hacer en el sur de Islandia. En nuestra guía completa de Islandia tienes más consejos y recomendaciones para planificar tu viaje. De todas formas, si tienes alguna duda, déjanos un comentario y estaremos encantados de ayudarte.